Seguidores

martes, 10 de junio de 2014

MI ESTADO DE MÜSICA

Cuando mi buena amiga Pilar me propuso expresar en pocas líneas, lo que supone la música en mi vida… accedí, pensaba que iba a ser algo más fácil la verdad, pero me he dado cuenta, que después de hurgar en mi pasado no lo ha sido tanto. ¿La música en mi vida?, he echado la vista atrás y tengo que reconocer, que hasta donde llega mi memoria, la música siempre ha estado ahí, puedo decir, que mi vida se ha construido acompañada de una banda sonora propia.

Supongo que, porque soy el penúltimo de siete hermanos, que entre nosotros no existe gran diferencia de edad, y que a todos nos ha gustado escuchar música, ésta ha estado siempre presente en mi vida, seguramente fueron ellos quienes pusieron en mi vida la primera ‘piedra musical’ y que con el paso del tiempo yo me he encargado de hacerla más y más grande.


Mis primeros contactos con la música, están asociados a reuniones familiares, somos una familia larga, muy alegre, cuando nos juntamos, es fácil que alguien traiga una guitarra y que dediquemos el rato a cantar juntos, entre canción y canción, pasamos el tiempo sin más preocupación que la de pasar ese rato felizmente. La música es un fuerte punto de unión entre todos nosotros.

Cuando era muy niño, a consecuencia de una complicación posoperatoria, tuve que pasar cerca de un mes en el hospital, por supuesto que mi familia me acompañó en todo momento, pero curiosamente, recuerdo perfectamente la música que escuchaba, me regalaron un radio-cassette y una cinta con canciones de los Beatles, aunque los días parecían más largos, con la música de los Beatles se me hizo más llevadero.

Luego, durante los siguientes años, la música seguía acompañándome, estaba en cada instante de mi vida, compartí música con los primeros amigos, con los compañeros de clase, con mi familia, todos crecíamos y la música permanecía a mi lado…

Recuerdo bien aquellos tiempos, escuchaba mucha música, los discos que compraban mis hermanos mayores, las canciones que emitían por la radio o la que ponían en algunos de los programas musicales de TV. Esa inquietud por la música me regalaba buenos momentos siempre, era una fuente de inspiración continua, me acompañaba en los momentos felices y me ayudaba a pasar los malos ratos.

Contaba con unos 11 años, y comencé a tener la necesidad de expresar más cosas, me gustaba escribir y dibujar, pero mi pasión era la música, y para mí, ella era el vehículo perfecto con el que poder plasmar todo cuanto quería decir. El primer paso era aprender a tocar la guitarra, junto con mi hermano Jose Luis, un año mayor que yo, comenzamos a aporrear un par de viejas guitarras y a cantar sobre los discos de los Beatles. Pasamos muchas horas juntos, eso nos unió mucho, aún hoy lo estamos... Parece mentira, pero no recuerdo una discusión con él, creo que no la hemos tenido nunca, nos queremos como somos y sé que lo que tenemos entre nosotros se ha construido sobre muchos pilares, el familiar, la amistad, el cariño, el amor y como no, la música.

Una vez aprendí los primeros acordes, empezaron a sonar las primeras canciones, fueron momentos mágicos, con la guitarra y mi voz, era capaz de mostrar mis sentimientos, de expresar mis emociones. Comencé a componer mis primeras canciones, no fueron gran cosa, pero experimenté con ellas grandes emociones, desde momentos muy tristes como cuando falleció una de mis abuelas, hasta cuando me llegó el amor por primera vez, con ese primer beso...

Más tarde, a mis 16 años, etapa de estudios, la música seguía presente en mí, con mayor fuerza si cabe, mi hermano y yo le seguíamos dedicando mucho tiempo, y sentimos la necesidad de compartir lo aprendido con el mundo, y así, por una de esas casualidades que te depara el destino, nos llegó la oportunidad de poder ofrecer a los demás nuestra música, y junto a ella, el poder mostrarnos tal como éramos, tal como somos… De aquellos años, en los que ofrecíamos nuestra música recorriendo toda España, me quedo con el cariño y el amor que sentí gracias a la música, cariño y amor que di y que recibí, fueron momentos muy felices, difíciles de olvidar.

La música y yo seguimos juntos, se ha convertido en una extensión de mi cuerpo, de mi mente, o está en mi interior o pasa junto a mí, la noto a mi alrededor, en cualquier lugar, está por todos lados, somos inseparables. Con ella he llorado, he reído, he amado, he vivido… seguramente, si volviera a nacer, viviría de nuevo la vida junto a ella, lo haría sin dudarlo, para mi, ha sido y es, la amiga más fiel.


Juan Carlos Martínez Garrido

Músico, compositor y cantante

Chan, dúo musical Chan Y Chevy

No hay comentarios:

Publicar un comentario