COMBATIENDO EL JET LAG

 Se denomina Jet Lag a la descompensación horaria que sufre nuestro "reloj interno" al tratar de adaptarse,  tras viajar en avión a largas distancias, principalmente si nos desplazamos a lugares con franjas horarias diferentes, pudiendo durar horas o incluso días.

Hemos de tener en cuenta, que si bien  se produce viajemos en la dirección que viajemos, la sensación se agudiza al viajar hacia el este, pues agregamos horas a nuestro horario y el día se hace más largo. Un desfase de 2 o 3 horas puede ser suficiente para que lo padezcamos, y según estudios, tienen más probabilidad las mujeres que los hombres y las personas mayores más que los jóvenes.

Los síntomas que se producen pueden ir desde el dolor de cabeza, aturdimiento, problemas de sueño, cansancio, hasta irritabilidad, deshidratación o desarreglos intestinales.

Consejos para aliviar los síntomas :

. Empezaremos cambiando los hábitos unos 3 ó 4 días antes de viajar, intentando ir adaptándonos al nuevo horario y clima.

. Intentaremos descansar y dormir al máximo
. Tomaremos una alimentación equilibrada, libre de grasas.
. Añadiremos un aporte de vitamina C, para mantenernos  activos a las horas adecuadas y cápsulas de ajo para favorecer la circulación ya que impide que la sangre se espese.
. Para el viaje, utilizaremos ropa y calzado cómodo, que no apriete.
. Nos hidrataremos bebiendo frecuentemente agua.
. Caminaremos por el avión si es posible y/o rotaremos manos y pies para favorecer la circulación,  realizando el ejercicio de apoyarnos en los dedos del pié poniéndonos de "puntillas" y bajando varias veces.
. Posteriormente, haremos lo posible por no hacer siesta, sino, dormir por la noche, y para favorecerlo, podemos poner unas gotas de esencia de lavanda, que nos ayudará a dormir, y por tanto, a estabilizar la secreción de melatonina.
Una infusión de valeriana y/o en pastillas, nos ayudará a tener un sueño relajado.
.  Tumbarnos con las piernas y pies en alto, facilitará la circulación tras un largo viaje y ayudará a eliminar la hinchazón, nos ayudaremos con una ducha de agua fría en las extremidades siempre en sentido centrípeto. Exponernos al sol y pasear, o realizar un ejercicio suave, será definitivo para encontrarnos mejor, sin olvidar la lecitina de soja, que nos evitará los dolores musculares.  Por último y principal, realizaremos el tratamiento reflexológico arriba indicado, en el que  trabajaremos la palma de ámbas manos, tratándonos así Intestinos, bazo estómago, y páncreas en mano derecha, e hígado e intestinos en mano izquierda.